Una realidad

       UNA REALIDAD

       Llega un momento de tu vida que te cuestionas sobre tu pasado. Te quedas sentado o tumbado o simplemente de pie recordando cosas que has hecho y en este momento te parecen infantiles o estúpidas. Yo me arrepiento de no haber tenido la mejor base de matemáticas, también me arrepiento de haber puesto a mi hermana en la palangana provocando que se cayese por la terraza siendo un bebé de 3 meses.

Te quedas pensando en lo que podrías haber hecho y no has hecho. En este momento me arrepiento de no haber hecho lo que podría haber hecho solo por miedo al rechazo o al fracaso. Durante mi infancia fui muy insegura y me refugiaba en mi juguete favorito, que irónicamente era la casa de muñecas de mi prima.

Durante mi vida he tenido muchos amigos y amigas, pero mi círculo íntimo lo forman nada más que 6 personas. Todos son mis mejores amigos, los conozco desde que era pequeña pero hay una persona muy especial, alguien que nunca se ha separado de mi a pesar de tener a sus propios amigos y que ahora este a punto de hacer una carrera universitaria: mi prima Ulay. Sinceramente no me acuerdo de cuando la conocí, pero se que ella me conoce desde que era un bebé, desde que llevaba pañales lo que quiere decir que es la primera amiga que he tenido en mi vida. Por ese motivo y por muchos más es una de las personas más importantes de mi vida. En ocasiones jugábamos y soñábamos que el mundo se acababa y nos íbamos a vivir a Marte junto con nuestros actores favoritos. Nuestro mundo era un continuo círculo de fantasía que a la mañana siguiente se convertía en otra fantasía. 

Uno de mis sueños más grandes es encontrar un trabajo que sea capaz de darme la vida que yo quiero. Siento que mi futuro es incierto y siento miedo porque a veces siento que mi esfuerzo nunca es suficiente, tanto en los estudios como en la vida, pero no me rindo. Por ese motivo pienso que no debemos dejar de intentarlo por mucho que avance el tiempo porque rendirse seria el verdadero fracaso. Las oportunidades pueden marchitarse como las calas, pero al igual que estas, resurgen unas nuevas oportunidades con ansias de vivir y que debemos aprovechar.

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